Pinchar o intervenir teléfonos es una de las búsquedas más populares de Google, cualquier persona puede acceder a diferentes sitios con tutoriales y explicaciones para el uso de dispositivos que permiten «pinchar» o intervenir llamadas. Si bien no todos los métodos expuestos pueden ser efectivos algunos otros dan indicios de vulnerabilidades que se pueden aprovechar con mínimos conocimiento tecnológico.
Tan sólo en la búsqueda de «pinchar llamadas» Google arroja 105,00 resultados e «intervenir teléfonos» hay más de 7 millones de resultados. Aplicaciones, dispositivos de espionaje, tutoriales para utilizar equipos avanzados. Toda esta información no nos permitirá hacerlo en cinco minutos, pero atar cabos acercará a más personas a la tecnología necesaria para vulnerar equipos telefónicos, pues conocimientos técnicos junto al uso de Ingeniería SocialLa táctica probada y verdadera del engaño es tan preocupante en los dispositivos móviles como en los ordenadores. Aunque es sencillo evitar los perjuicios causados por los ataques de ingeniería social, estos ataques siguen siendo muy eficaces. La mayoría de los ciberataques empiezan en el correo electrónico. En estos ataques se usan técnicas como la suplantación de identidad que pretenden... aumenta el rango de ataques cibernéticos.
Mientras más alto el perfil, más grande el riesgo de ser intervenido
Los personajes de alto nivel son blancos comunes para la intervención telefónica, pero como si se tratara de una guerra convencional, en los ciberataques hay daños colaterales, y ahí es donde queda un ciudadano común, además ampliar estas tecnologías hacia otros ámbitos ha vulnerado la seguridad y privacidad de periodistas, luchadores sociales, candidatos, miembros de equipos de campaña, defensores de derechos humanos, ejecutivos de empresas trasnacionales, familiares de personas de alto nivel y civiles comunes de quienes se extrae información impunemente.
Ya sea por aplicaciones como Pegasus o la instalación de antenas GSM falsas, entre otras tecnologías más, personas de todo el mundo están vulnerables ante el espionaje telefónico y la extracción de información personal